Distorsión
de la realidad o simulación virtual
por: Jorge R LLamas (Colombia)
Contemplábamos la escena como dioses
en cautiverio por el cristal de la ventana. En el fondo sabía que podía cruzar a ese otro
tiempo, ser parte de ello al instante, personificar como si por primera vez
entrara al otro lado. Las historias se cortan solas- dije con absoluta
confianza. Mientras Cristo captó la frase igual a una antaña criatura
mitológica manejando toda su percepción a través del cristal, en el interior de
la casa se hallaban dos mujeres al parecer madre e hija, tejían un manto de
color claro que no recuerdo con precisión, sentadas en mecedoras de mimbre, y
ellas solo esperaban al suponer al hombre de la casa, Cristo sin palabras se
mantenía a la expectativa.
No necesitaba llave alguna para abrir
la puerta, creyendo tener la facultad de cruzar todas las puertas, me introduje
poco a poco en esa dimensión, entré con firmeza, realmente daba la
impresión, y me encontré yo haciendo el
papel del marido ausente, miré a la joven mujer de cabello negro, labios
rojizos y una blanca piel que le sentaba muy bien con su vestido veraniego. En
cuestión de segundos percibí esto, con cautela dirigí la mirada hacia atrás,
verifiqué la ventana pero la condición de Cristo era como la un hombre
invisible. Sé que Cristo permanecía allí, las dos mujeres desconocían esto,
Cristo no se veía por ningún lado, repito, sé que él esperaba.
Con un pequeño beso saludé a mi mujer
como señal de verdadero amor. En posición de una madre querida, la mujer de
avanzada edad estiró su mano para darme una taza de té, esto ocurrió mucho
antes, y con justa razón temo perder cada elemento que envolvía el salón, en
detalle el ambiente era fuera de contexto, un vástago muerto adornado con restos
de una vieja familia europea que ha ido mezclándose en
mi sangre.
Siendo así me sentía invadido de
sentimientos ajenos y temía dejar a mi mujer, debía optar por la frivolidad de
hacer tripas corazón para volver y con el mismo artificio del comienzo crucé la
puerta para salir, resignado cobraba mi condición mística.
Al despertar me sacudí de una antigua
fuerza perdida, ahora lo digo lo más humanamente posible, lo incomodo ha sido y será contar esa magnífica experiencia onírica. Incluiré
ciertos detalles que omití anteriormente, por ejemplo, la que tejía era la
mujer que amé, recurro a la pluralidad por razones que se quedan bajo sospecha,
aquella absoluta confianza se acercaba más al estoicismo, la tonalidad del
sueño fue intensa en todos los sentidos en el vestido de verano sobresalían
hermosas flores rojas en un insostenible fondo blanco, la clave es creer que es
posible y real, donde el movimiento y fuerza se funde en un solo lenguaje.
Sobran las palabras.
Vagas ideas
para tesis
Es bueno lo que dejaste de hacer por
mí, enemiga intima de la soledad. Soy un idiota feliz, y libre de verdad de
toda culpa, edificios mal elaborados de literatura caen sobre ti como aves
rapaces, como malos actores que se ríen de esta victoria y quizá la única, me
abandono con pereza, tranquilo, triunfante a tus brazos abiertos cómplices de mi
amor, una acción inocente que cabalga en tus senos, nace la noble criatura,
ahora soy como un conejo enjaulado, observado y transfigurado, me escapo a
través del espejo.
Muchas gracias por el aporte Marcos...
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